Una receta fácil, rica y tradicional con lamprea! La lamprea es un manjar prehistórico con carne gelatinosa y sabor único, muy apreciado en Galicia y el norte de Portugal. La preparación más clásica y deliciosa es la lamprea a la bordelesa (con vino tinto y su propia sangre, que le da una salsa espesa y profunda). Es un plato de temporada (invierno-primavera) y espectacular para ocasiones especiales.
- 1 lamprea fresca de 1-1,5 kg (pide al pescadero que la mate, desangre y limpie; reserva la sangre)
- 2 cebollas grandes
- 2 puerros (parte blanca)
- 2 zanahorias
- 4-5 dientes de ajo
- 750 ml de vino tinto bueno (Ribeira Sacra o similar)
- 50 g de jamón serrano o tocino
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta
- Opcional: un chorrito de brandy y laurel
Preparación (unos 90 minutos):
- Corta la lamprea en rodajas de 4-5 cm (el pescadero puede hacerlo).
- En una cazuela grande, calienta un chorro de aceite y sofríe el jamón picado, cebolla, puerro, zanahoria y ajo todo picado fino (sofrito 10-15 min a fuego medio).
- Añade las rodajas de lamprea, salpimienta y rehoga 5 minutos.
- Vierte el vino tinto (y brandy si usas), añade laurel y cubre. Cocina a fuego suave 45-60 minutos hasta que la lamprea esté tierna y la salsa reducida.
- Diluye la sangre reservada con un poco de vino frío (para que no cuaje) y añádela al final. Remueve 2-3 minutos hasta que espese la salsa (no hierva fuerte).
- Sirve caliente con arroz blanco o patatas cocidas. ¡La salsa es puro vicio para mojar pan!
Consejos para que quede perfecta:
- La sangre es clave para la salsa espesa y brillante → no la omitas.
- Si no tienes sangre, usa un poco de harina para ligar, pero no es lo mismo.
- Acompaña con un vino tinto joven.
Variante más sencilla (si la bordelesa te parece fuerte): Lamprea guisada gallega con patatas, pimentón y ajo (similar al all i pebre, pero sin picante).
Fin de receta